Una empresa de telecomunicaciones estadounidense entrenó un modelo de inteligencia artificial a partir de años de llamadas telefónicas y videollamadas de los reclusos y ahora está probando ese modelo para escanear sus llamadas, mensajes de texto y correos electrónicos con la esperanza de predecir y prevenir delitos.
Un portavoz de Securus dijo que el uso de datos para entrenar la herramienta “no se centra en vigilar o apuntar a individuos específicos, sino en identificar patrones, anomalías y comportamientos ilegales más amplios en todo el sistema de comunicación”. Agregaron que los centros penitenciarios determinan sus propias políticas de grabación y monitoreo, que Securus sigue, y no respondieron directamente si los reclusos pueden optar por no usar sus grabaciones para entrenar IA.
Publicado originalmente en technologyreview.com el 1 de diciembre de 2025.
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